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| Autor :
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| Título :
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La comercialización de las maderas tropicales en américa del sur especies madereras de la selva tropical sudamericana |
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| U.Topografica :
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333.75 O68 |
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| Fecha Pub. :
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1977 |
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| Tipo Impresion :
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Impreso |
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| Nro. Paginas : |
66p.; 29cm. |
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| Idioma : |
Español |
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| Indice Tematico : |
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| Resumen: |
Se seleccionó el año 1973 como base de referencia para este estudio, ya que por entonces no se había sentido todavía el efecto de la recesión sobre la pauta de la oferta y comercialización la «adera, Durante dicho año, la producción de trozas en los bosques tropicales sudamericanos al cantó la cifra de 10,8 millones de m , que se aprovecharon casi totalmente en las selvas tropicales de Bolivia, el Peni, Colombia, Venezuela, Guyana, Surinam, GFuayana Francesa y del área Amazónica del Brasil.
Las exportaciones de productos forestales de estos ocho países alcanzaron en 1973 un -valor total de 193 millones de $EE»UU. quedando muy por debajo del nivel de otras regiones exportadoras de maderas tropicales. La madera aserrada, con 862.000 m * fué la partida mayor, seguida por las trozas, con 461.000 m ; las chapas, con 73*000 m y la madera contra-, chapada, con 58*000 m • Solamente se exportó el 4 por ciento de la producción total de trazas para aserrar y para chapas, y más de 10 millones de m se transformaron localmente en productos derivados de la madera, la mayoría de los cuales fueron absorbidos por los mercados nacionales.
El estudio analiza, la producción y el comercio por especies en los nueve países citados. Se parte de definir como comerciales todas las especies madereras producidas en cantidades superiores a 1000 m y como "menos conocidas" todas las demás especies, siempre que se produzcan en cantidades inferiores a 1000 m o que, no utilizándose comer-cialmente, se hayan identificado - mediante un sistema de evaluación ideado específicamente con este fin - como especies que tienen un uso potencial en forma de madera aserrada, chapas y madera contrachapada.
La variable heterogeneidad de estos bosques en cuanto a su composición por especies lleva consigo diversificaciones desfavorables en cuanto a las propiedades de las maderas. Hasta la fecha se comercializan unas 210 especies distintas de maderas bajo 125 nombres comerciales; otras 263 especies madereras son más o menos conocidas en el comercio. Aunque, segtín la información disponible, muchas especies madereras comerciales están ampliamente distribuidas por toda la zona, ninguna de las 210 especies comerciales se produce en los nueve países. De hecho, la mayoría de las especies madereras se comercializan solamente en uno o dos países y, en los otros, o no se utilizan nada o sólo en pequeña escala. Las preferencias respecto a las especies madereras pueden variar considerablemente de un país a otro y, con frecuencia, de una industria a otra.
Las maderas de densidad media constituyeron el 65 por ciento de la producción total de trozas para aserrar y para chapas. Sólo la VIROLA representó el 24 por ciento, seguida por la CAOBA (Mahogany), una de las maderas más finas para chapas y para ebanistería que solo alcanzó el 6 por ciento, seguida por el CEDRO - 3f8 por ciento - y la ANDIR0BA, con el 3|2 pof ciento. Sumadas las maderas de escasa densidad y las de densidad'media, representaron el 79 por ciento y, por consiguiente, a las especies de densidad alta y muy alta solamente representaron el 21 por ciento de la producción total de trozas. Esta pauta de wt i limación es contraria a la distribución real de las maderas por densidad en los bosques, cuyo peso específico o densidad medie es smstancialmente mayor.
Un análisis de la aceptación por el mercado de las maderas comerciales basado en grupos de propiedades y clames de valor revela que las cualidades y valores relativos no están diferenciados en la mism medida que lo están, por ejemplo, en el caso de las maderas tropicales africanas* fe vista de ello se parte de la base de que el potencial de los bosques de la gran cuenca ama sónica todavía ha de evaluarse por completo, no sólo desde el punto de vista cuantitativo, sino tambián en el aspecto cualitativo. Los esfuerzos destinados a ampliar el volumen de madera comerciable comprenden las posibilidades siguientes: (i) obtener los máximos valores para las maderas, (ii) agrupar las especies madereras y (iii) fomentar las especies mesoladas para su utilización industrial integrada, lo que implica que es posible y con frecuencia necesaria la acción combinada con (i) y (ii).
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| Descriptores: |
< Productos forestales > < Epecies > < Producción > < Comercialización- Madera > |
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